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No puedo dejar de seguirle la pista a Ol Sasha. Su desafío me resulta atractivo, a veces incomprensible. En ocasiones lo considero muy intrépido. A ratos un ser iluminado y, a ratos, un loco lobo solitario.
Reconozco que nuestro mundo precisa de un mensaje inspirador. No es fácil toparse con música que logre hacer a las personas reflexionar. Estamos frente a un cantante de consciencia. No un cantautor protesta. Un compositor que interpreta sus propias creaciones. Pero sobre todo, un ciudadano que comparte sus recetas y soluciones, ofreciendo una visión seductora acerca de la sociedad que aguarda en los corazones humanos.
Intento una vez más, antes de su viaje a España, rescatar la más pura esencia de este hombre. Voy a exprimirlo al máximo en esta entrevista. Hasta la última gota.
LHH.- SIEMPRE HAS SIDO ASÍ… TAN SEGURO DE LO QUE HACES Y DE LOS MOTIVOS QUE TE IMPULSAN A ACTUAR DE UNA DETERMINADA MANERA
Ol Sasha.- A lo largo de mi vida, allí donde fuera, prefería actuar con mis normas que aceptar normas impuestas. Nunca me gustó seguir a la multitud y llevar la ropa de moda o utilizar las expresiones de mis compañeros de clase. Recuerdo que en un campamento de verano, los profesores me llamaron a una reunión en la que me solicitaron que no subiera a los árboles porque otros niños me imitaban y ellos no tenían mi agilidad. Fue entonces cuando escuché por primera vez la palabra “líder”. Yo sólo disfrutaba buscando otra perspectiva del mundo, nunca busqué llamar la atención de nadie. Simplemente quería ser yo, y, ante la prohibición, he sentido demasiadas veces una sensación de “no encajar”.
LHH.- CÓMO ENCAJABAS ESE “NO ENCAJAR EN EL MUNDO”… EL NO SER EXACTAMENTE AQUELLO QUE SE ESPERABA DE TI
OS.- Descubrí con los años que soy una persona extremadamente sensible, hasta el punto de soltar una lágrima con mucha facilidad. Suelo decir a las mujeres: “Nunca te fíes de un hombre que no llora”. Las lágrimas limpian el alma. Pero en vez de sentir y ver con los ojos del alma, nos han adoctrinado para mirar desde el Ego en un torbellino de pensamientos que nos confunden a nosotros mismos.
LHH.- TE HA COSTADO RELACIONARTE CON LAS PERSONAS
OS.- Me costó encontrar profunda empatía con las demás personas, principalmente porque la sociedad en la que crecí me enseñó a “sacarle partido” a la gente evitando crear lazos. Me adiestraron para “ser el mejor” y mantenerme por encima de los demás, pero una vez alcanzado el logro no puedes evitar sentirte terriblemente vacío y con una sensación de que “la lucha” no merecía la pena. Luchar no te lleva a nada gratificante, te posiciona en el terreno del vencedor y el vencido… el triunfador y el fracasado… alejados de la cooperación y la sinergia humana. A mí me interesa la fraternidad que regocija, la alegría compartida. El bienestar general. Son cuestiones imposibles de entenderse si no se practica la consciencia de unidad, la ayuda recíproca, el mutuo beneficio.
LHH.- CÓMO DEFINE OL SASHA… A OL SASHA
OS.- Más que inteligente, me considero “listo”, audaz, atrevido, osado, valiente… sin ser imprudente. Aplico creatividad a mis actos que de repente se convierten en originales al compararse con los comportamientos estandarizados de los grupos con los que he interactuado. Me gustaba relacionarme con las personas, pero a menudo me cansaba de inmediato si no me aportaban algo interesante, algún dato que yo desconociera, y, sobre todo, me aburría con la rutina. Pero lo peor eran las conversaciones realmente “estúpidas” basadas en lo que habían dicho en la televisión o lo que hacen y tienen las celebridades.
LHH.- VAYAMOS UN POCO MÁS A LO PROFUNDO…
OS.- Reconozco que fui muy “radical” porque no quería perder mi tiempo en trivialidades, necesitaba aprovechar al máximo cada instante de mi existencia. Era muy intolerante con lo absurdo, con aquellas ideas o actos que no estaban bien argumentados o no tenían un servicio útil. Yo no hacía nada sin tener un motivo y saber la intención verdadera de mi acción, pero la mayoría de personas de mi entorno solían decirme que yo andaba siempre “justificándome” cuando lo único que hacía era examinarme para encontrar la coherencia en mi vida.
LHH.- CONSIDERAS QUE PERSISTE ESTE RASGO
OS.- Todavía hoy me exalto y entro en erupción como un volcán cuando se falta a la verdad, no entiendo la hipocresía o la doble moral. Asumo que la finalidad de una mentira es tan dañina que no tiene sentido utilizarla y, ante una falsedad clara o un engaño diáfano, me enciendo rápido como un fósforo. ¡Lo siento! Sé que no es manera de actuar, pero es mi naturaleza. Prefiero evitar esta reacción que obviamente no existe si previamente no hay una mentira directa… amo la verdad… necesito la verdad… la verdad, en toda su desnudez, aunque duela. Todo sería perfecto si existiera la franqueza y la honestidad y la transparencia.
LHH.- SIEMPRE ERES MUY CRÍTICO CON EL SISTEMA
OS.- Lo que no soy es un borrego. Tengo opinión propia. No voy con el piloto automático como tantos autómatas del Sistema (chasquea los dedos mientras me guiña el ojo coquetamente). No participo del pensamiento único, el dogma religioso, o lo que es políticamente correcto. Siempre me he caracterizado por ser la oveja negra que se aleja del rebaño. Me niego a formar parte de una maquinaria que me limita. Decidí a temprana edad no someterme a los designios de otras personas, por eso mi fragilidad laboral: muchos empleos en muchos sectores, pero siempre salvaguardando mi independencia para organizar la tarea y desempeñarla con libertad y ganando en función de los logros alcanzados, lejos de los horarios y la autoridad. Quizás por eso solía ser un modelo de referencia entre mis compañeros. Jamás me he doblegado. Siempre he salido airoso de cualquier eventualidad, sin agachar la cabeza, salvaguardando mi dignidad. Fiel a mi naturaleza, principios y convicciones.
LHH.- TIENES UNA ESPECIE DE AVERSIÓN A LA AUTORIDAD
OS.- La autoridad que no está respaldada por la coherencia y la justicia y la cortesía, me desagrada sobremanera, igual que la jerarquía laboral. Prefiero trabajar solo, desempeñando una parcela concreta que aporto al conjunto para mejorar el resultado, asumiendo la responsabilidad de mis actos. Yo puedo hablar por mí, pero no por boca de otras personas. Cada hombre y mujer debe comprometerse y cumplir con la palabra dada. Nadie puede decir a otro qué hacer. Sí puede mostrarle una manera adecuada de hacer –esa- actividad, dado el caso de tener más conocimientos y mayor experiencia, pero es lo mismo que entregar una linterna… al final, el botón lo prenderá o no lo prenderá cada persona bajo su propia elección y responsabilidad. ¡Libre albedrío!
LHH.- DANOS ALGÚN DATO MUY PERSONAL… REALMENTE ÍNTIMO
OS.- La tragedia del fallecimiento de mi hija Ágatha, justo la semana que iba a cumplir sus dos añitos. Eso me hizo variar las ideas que tenía acerca de la muerte. Penetré en lo espiritual, descubriendo el mundo que me aguardaba desde siempre en mi interior. Desde que tengo uso de mi consciencia he buscado el significado de la vida. Me interesaba entender el mundo y a falta de luz a mi alrededor, indagué en libros de todo tipo… ojalá por entonces hubiera existido Internet (risas). Nunca me cansé de preguntar mucho a las personas que me parecían entrañables y especiales, hasta que me recogí en mi intimidad y escuché mi propia voz. Sucedió en Ometepe. Plasmé la experiencia en mi autobiografía “CONCILIACIÓN: El hombre que se abrazó por dentro”.
LHH.- LA HE LEÍDO… ME ENCANTÓ… ESE FANTÁSTICO PREFACIO QUE HABLA DEL DESPERTADOR DE ALMAS A MODO DE POETICO CUENTO ES MARAVILLOSO. SOBRE TODO CUANDO SEÑALAS LO DE “INGENIERO DE SU PROPIA ALMA”
OS.- Fíjate Leticia, en la mayoría de ocasiones, allí donde iba, siempre había quien me decía “tienes complejo de mesías”. Cierto que siempre investigué en cómo podía contribuir a mejorar el mundo. Siento un potente impulso por hacer “algo de provecho” para la Humanidad y, he tenido algunos obstáculos para identificar el camino. Sin embargo, al no perder el enfoque, al atender la resonancia de mi energía, lentamente se han ido puliendo las piezas que han conformado un perfecto puzle que se va uniendo y, hoy, ya tengo la visión panorámica que siempre intuí. Mi viaje ha dibujado el sendero invisible que se hace visible.
LHH.- ES PERFECTA ESTA FRASE “SENDERO INVISIBLE QUE SE HACE VISIBLE”… LA HE LEÍDO EN TEOREMA PARA EVOLUCIONAR, Y ESTÁ MUY PRESENTE EN FÓRMULA AVE FÉNIX… REALMENTE PUEDEN VERSE REFLEJADAS ESTAS PALABRAS EN TI Y TU HISTORIA… ERES EL ACIERTO DEL TRAYECTO EXISTENCIAL… CUANDO SE HACE EL VERDADERO RECORRIDO DEL ALMA
OS.- Cuando llegaba a un lugar, curioseaba, observaba, analizaba. Tomaba una posición, y, una vez comprendía cómo estaban las cosas, quería “mejorarlas”. Esto suele molestar, sobre todo cuando atenta contra los intereses de quienes dominan el lugar. A menudo había cosas que no funcionaban y yo quería aportar, es decir, ¡sumar! Pero mis propuestas escapaban al control de terceros y rápidamente era silenciado y marginado con la correspondiente etiqueta de “inadaptado” o “revolucionario” o “conflictivo”. Era realmente frustrante porque en mí proceder nunca había malicia. Existía la incomprensión de parte de la mayoría…y eso hacía que yo me descifrara en clave de “bicho raro” o “individuo que no merece el amor de las personas”. En aquel tiempo, todavía no sabía del gobierno en la sombra y de la manipulación del estado a través de la educación y la salud y la religión y la ciencia.
LHH.- CÓMO FUE TU INFANCIA… HABLANDO DESDE LA INTIMIDAD
OS.- La verdad es que ya en mi infancia era consciente de mí mismo, Leticia. Era muy perceptivo e intuitivo y mi sabiduría innata estaba presente como una luz que chispea. Sin embargo, empezó a debilitarse desde que me encerraron en una aula/jaula y me obligaron a sentarme en una silla, amarrándome de pies y manos, exigiéndome que memorizara datos que me parecían no tener sustancia ninguna (añade en susurros) y que la mayoría de esos datos se ha confirmado que eran falsos. ¡Yo quería correr por el bosque! ¡Yo quería cantar con los pájaros! Quería desarrollar otras habilidades. Mi inventiva y la fantasía hervían bajo mi piel. Necesitaba compartir mi mundo visionario, pero a los adultos les pareció abstracto, y a las instituciones por las que fui pasando, muy peligroso. ¡Yo era un salvaje al que no conseguían domesticar! No aceptaba coacciones o intimidaciones.
LHH.- HE NOTADO EN TUS TALLERES DE CAPACITACIÓN Y LAS CONFERENCIAS RELACIONADAS CON EL DESARROLLO HUMANO, QUE MANTIENES UNA POSICIÓN MUY CLARA SOBRE LA PEDAGOGÍA Y LA MANERA DE ENSEÑAR
OS.- Aprender es una experiencia activa, reflexiva, que se ejerce desde la propia vivencia, pero la escuela obliga mediante la estrategia de una exigida pasividad que se premia con títulos académicos… una especie de salvoconducto para el mercado laboral. Esa fue la primera estructura que sentí como un corsé que me aprisionaba el alma, y supongo que ahí comenzó mi indisciplina frente al poder. Yo soy respetuoso con aquello que entiendo y comparto, con las cosas que me explican y tienen una buena defensa, con todo lo que sirve y beneficia… pero no cuando es únicamente una ventaja exclusiva para unos pocos. Sin explicaciones convincentes, por el uso de la fuerza, no me parece una forma adecuada de proceder. Y por eso es que nunca fui cómplice de “las tonterías” de una sociedad ciega al sentido común y a la potencia universal. Preferí retirarme del Sistema para encontrar mis tesoros en la bahía de Samaná…donde surgió Método Nación Global ENERGYS… Soul Anarchy Coin… acuña anarquía del alma.
LHH.- ESTOY VIVIENDO DE PRIMERA MANO ESTE GIRO INESPERADO DEL PROYECTO ENERGYS HACIA EL MUNDO MUSICAL
OS.- Espera, Leticia, dame un instante para matizar lo anterior…Si alguien me pide que haga algo, debo conocer las razones, el por qué y el para qué de la actividad. De lo contrario no me gusta entregar mi tiempo y energía. Necesito cooperar en acciones que van de acuerdo con mi visión cósmica. He pasado mis primeros cuarenta años con una sensación de impotencia y frustración que afortunadamente he dejado atrás… Ahora me centro en la OCUPACIÓN VITAL… canto la música que me hace sentir vivo… y que benéfica a la comunidad. Juntos podemos crear la SOCIEDAD MEJORADA.
LHH.- ¡SÍ! TIENES RAZÓN… AHORA TOCA ENFOCARSE EN TU FACETA DE MÚSICO… TUS CANCIONES SON UNA PROLONGACIÓN DEL MÉTODO ENERGYS Y EL CONCEPTO DE NACIÓN GLOBAL. EN ELLAS ESTÁN PRESENTES LOS PRINCIPIOS HUMANISTAS QUE SIN DUDA HARÁN DE LA CIUDADANÍA PLANETARIA UNA SOCIEDAD MEJORADA.
FELIZ VIAJE A ESPAÑA… YA SON OCHO AÑOS SIN PISAR EL PAÍS QUE TE VIO NACER. ¡SUERTE!
OS.- Me desagrada el concepto de “suerte”, Leticia. Confío en ese instante fantástico… justo cuando la oportunidad se cruza con la preparación. Yo estoy listo. He trabajado mucho. Me he esforzado, poniendo todo mi amor en cada etapa del proyecto. Satisfecho, aseguro haberlo realizado con lo mejor de mí, poniendo toda la leña al fuego. Ahora le toca a la audiencia tomar una posición respecto a cada canción… a las creaciones que provienen del corazón… y que son pedazos de mi propia alma. Todo está disponible en Internet.